Desde el primer día lo concebimos no como un informe que almacena conocimiento (que también), sino como una herramienta práctica de decisión pública y de colaboración entre empresas, agentes y administración. El propósito: reflexionar sobre el modelo de innovación que quiere y puede tener la región y convertir datos y escucha en palancas de cambio reales y sostenidas en el tiempo.
Para conseguirlo combinamos tres vías de trabajo: fuentes primarias (entrevistas estructuradas a pymes y agentes del ecosistema, un cuestionario ad hoc y dinámicas de co-creación), fuentes secundarias (análisis comparativos y documentación previa) y metodologías de diseño de futuros para orientar la acción con escenarios claros.
Articulamos el contenido en cinco grandes enfoques que facilitan el aterrizaje de medidas: comparativa interregional, políticas sectoriales, medidas sistémicas para una “región innovadora”, respuestas a barreras de las pymes y acciones vinculadas a los escenarios de futuro. Esta arquitectura permite que cada actor encuentre “dónde actuar” según su rol y capacidades.
El diagnóstico mostró un potencial enorme pero también fricciones muy concretas que son las que nos ofrecen la posibilidad de actuar para evolucionar. El resultado práctico se concreta en un catálogo de acciones y recomendaciones y en cuatro líneas estratégicas de corto–medio plazo. Todo ello, acompañado de una llamada a definir líneas de largo plazo coherentes con el modelo de innovación que Aragón decida impulsar.
En síntesis, este Libro Blanco es un punto de partida para pensar, decidir y actuar con ambición compartida: una guía para transformar el potencial innovador de las pymes aragonesas en resultados tangibles y sostenibles, desde la proximidad y la colaboración.
